Jakare, gambiano y de 30 años, ha encontrado trabajo como instalador de placas fotovoltaicas a través del programa de inserción laboral impulsado por la Fundación La Caixa y la Fundación Oscobe para personas en riesgo de exclusión.
El joven residente en Girona, llegó a España cuando tenía 15 acompañado de su hermano. Lo hizo con un visado gracias a que su padre residía en la capital de la comarca del Gironès.
Casado y con dos hijas (3 años la mayor; 9 meses la pequeña), explica que supo del curso para aprender a instalar placas fotovoltaicas gracias a su cuñado, que lo había hecho. La formación duraba dos meses e incluía unas prácticas en la empresa Solventa6, para la que hoy trabaja.
"Me gusta lo que hago", confiesa a La Vanguardia. Antes de hacer el curso, estaba en paro: “Nos costaba mucho llegar a fin de mes, cosas de la vida”.